Gana más dinero, haciendo lo mismo
No es clickbait, ni tendrás que despertarte a las 5 de la mañana a hacer burpees
Hola, soy Prometeo y hoy te contaré una habilidad fundamental para sacarle más provecho al valor que tienes.
Me encanta poder anunciaros el primer patrocinador de la newsletter, Summiz.ai
Summiz es una de las herramientas que uso para hacer este contenido. Me permite resumir videos de varias horas sin perder ni una sola idea. Para la edición hoy me he ahorrado 2 horas y 10 minutos al resumir este video, cuidado no te hagas spoiler.
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Gana más dinero, haciendo lo mismo
Hace unos cuantos días, me encontraba con esta noticia por Twitter
Cada día me la sopla mas la política, no os voy a mentir. Lo que si me importa es que mi generación pierda toda esperanza. Si los jóvenes no tenemos ilusión quien la va a tener.
Quiero poner mi grano de arena y mejorar, aunque sea un poco, la vida las personas. Siempre lo he intentado con mis amigos más cercanos, pero no se puede ayudar a quien no quiere ser ayudado.
La realidad de muchos jóvenes es una mierda, la mía no es así. A los 25 di un cambio radical en mi vida, ahora pocos años después no me preocupo por el dinero, tampoco soy millonario, y me encanta en lo que trabajo.
Nunca negaré que tuviera suerte, solo un imbécil lo haría, tampoco diré que fue fácil, que lo conseguirás rapidamente y que todo el mundo puede hacerlo. No me gusta mentir.
Esta es la primera edición, donde cuento conocimiento que me ha ayudado.
Bueno me dejaré de chapas, e iré al grano.
¿Cómo podemos ganar más dinero haciendo lo mismo? Hay varias respuestas a esa pregunta, pero hoy nos centraremos en una, negociar.
No soy Superman
No soy un negociador experto, no soy un superhéroe, no todo me sale bien. Voy a contarte mi experiencia y los pequeños trucos que me han funcionado.
Negociar, es solo la guinda del pastel, en la mayoría de casos, pero una guinda que sienta muy bien. No vas a pasar de cobrar 1326 a 3754 euros solo por saber negociar tu salario.
Una buena negociación pueden ser 217 euros extra al mes. Pensarás que es una mierda, pero con ese dinero podrías invitar a tus padres al restaurante que les encanta, tener unas mejores vacaciones o estar cerca de dar la entrada a tu hogar.
A negociar se aprende negociando
Sí, pero no. ¿Te imaginas que a un estudiante de medicina le digan “a operar se aprende operando“ y tenga que hacerlo en su primer día?
Todo proceso requiere conocimiento y práctica. Una buena entrada a la madriguera de conejo de la negociación es Chris Voss, ex negociador de secuestros del FBI con 24 años de experiencia. Su libro “Rompe la barrera del no” es genial, además de fácil de leer pues mezcla las lecciones con anécdotas como negociador. Aquí tenéis un resumen de una de sus mejores entrevistas.
El título en inglés es “Never split the difference“ nos da una pista del punto de vista del autor, atacando frontalmente a la teoría sobre negociación desarrollada en Harvard en los años 70, donde se supone a las 2 partes racionales y que acabarán “partiendo la diferencia“ y llegando a un punto donde ganen los dos. La negociación totalmente racional funciona, solo que somos la especie equivocada.
La negociación puede aplicarse para desde asuntos cotidianos hasta profesionales, pero por simplicidad te comentaré como negocié mi ultimo salario, antes de entrar y como lo estoy haciendo una vez me han contratado.
Puntos comunes
Sea una entrevista de trabajo o una conversación de subida de salario debes de tener una adecuada preparación y saber cuanto se paga en el mercado en esa posición. Si llegas a la conclusión de que en tu posición no puedes ganar más busca posiciones próximas mejor pagadas y formaté para transicionar. Esto es algo que da para otra artículo.
Durante la conversación tienes que ser empático, ya sea empatía real o táctica. Pregúntate: ¿Cuál es su objetivo?¿Cómo puedo ayudar a cumplir su objetivo?¿Sigue las reglas o puede hacer las reglas? ¿Pierde algo pagándote más? Entiende que la empatía es crucial en las negociaciones. No se trata solo de estar de acuerdo, sino de comprender la perspectiva de la otra parte.
Mientras que la empatía abre la puerta, la asertividad te permite negociar de forma efectiva. Expresa tus necesidades y expectativas de manera clara, sin ser confrontativo.
Entrevistas de trabajo
Es crucial que te presentes no solo listo para responder preguntas sino también para hacer las tuyas. Conocer la empresa, los salarios típicos para el puesto y la industria te permite entrar en la entrevista con una base sólida de conocimiento.
Imagina que estás investigando para asegurarte de que no solo te ven como un candidato informado, sino como alguien que ha hecho su tarea y conoce su valor. En las entrevistas hay una asimetría de conocimiento, siempre el entrevistador sabe más por lo que tienes que intentar equilibrarlo.
Si te preguntan sobre tu salario actual, recuerda que es una táctica que puede limitar tu capacidad de negociación. Mejor evítalo si puedes, y en su lugar, enfócate en lo que el mercado está pagando por tu conjunto de habilidades y experiencia.
Cuando llegue el momento de hablar de cifras, intenta no ser el primero en mencionar un número específico. Deja que el empleador haga la oferta inicial y utiliza eso como punto de partida para negociar hacia arriba. Y recuerda, negociar no siempre se siente cómodo, pero mantener el control de la conversación y expresar claramente tus expectativas puede ayudarte a conseguir un resultado que refleje verdaderamente tu valor.
Aumento de sueldo
El timing y la presentación son clave. Es ideal abordar este tema después de haber demostrado tu valor a través de logros significativos o al finalizar un gran proyecto. Prepárate para discutir detalladamente cómo has contribuido al éxito de la compañía y cómo tus esfuerzos se alinean con los objetivos más amplios de la organización.
Hay compañías las cuales tienen planes de desarrollo, lo que por un lado puede ser negativo porque no vas a conseguir una subida instantánea, pero sin embargo puedes trazar un plan con tu jefe que te permita alcanzar una posición superior donde el salario es mejor.
Si te encuentras con una oferta inicial que no cumple con tus expectativas o necesidades, no tengas miedo de iniciar una negociación abierta. Pregunta sobre la flexibilidad de la oferta y explora otras compensaciones que puedan hacer el paquete total más atractivo, como beneficios adicionales o bonificaciones por rendimiento.
Si las negociaciones no van bien y sientes que lo que se ofrece simplemente no es justo, recuerda que no llegar a un acuerdo puede ser mejor que aceptar una oferta que no cumple con tus expectativas o necesidades. Siempre hay otras oportunidades y, a veces, la mejor decisión es seguir buscando.
Conclusión
No olvides que la negociación es una parte fundamental de tu desarrollo profesional. Con cada intento, te vuelves más hábil y seguro en tus capacidades. Aprovecha estas oportunidades para crecer, aprender y avanzar en tu carrera. Al final, la persistencia y la preparación te llevarán a obtener no solo el salario que deseas, sino también el respeto y la valoración que mereces.
Además, considera que parte de ser un candidato y empleado valioso implica estar en constante aprendizaje y mejora. Aprender nuevas habilidades y mantenerte actualizado en tu campo o adyacentes no solo te hace más competitivo, sino que también te proporciona más herramientas y argumentos a la hora de negociar tu salario. No te conformes con lo que ya sabes; busca siempre cómo puedes aportar más valor.
En los próximos artículos, os comentaré en cómo identificar y adquirir estas nuevas habilidades que pueden marcar una gran diferencia en tu carrera y en tus negociaciones salariales. Mantente atento y sigue invirtiendo en ti mismo, porque el conocimiento y las habilidades son las mejores armas en cualquier negociación.